¿Tu cuerpo tiene tendencia a retener líquidos? Hoy os daremos algunos consejos para ayudar a solucionar este problema que nos preocupa a todos.
Desayuno
Lo primero a tener en cuenta será hacer un desayuno completo incluyendo lácteos, cereales y fruta (especialmente aquellas con efecto drenante como la piña, la sandía o el melón).
Menos sal y más potasio
El potasio mantiene el equilibro hídrico del organismo y contrarresta la acción retenedora de la sal, por lo que debes aumentar su ingesta. ¿Algunos alimentos que lo contienen? El plátano, las acelgas, las patatas, el aguacate, las espinacas…
El agua, tu aliado
Bebe al menos entre 1.5 y 2 litros de agua cada día. La manera de que no se te olvide beber es tener siempre a mano una botella de agua y recurrir a ella con frecuencia, incluso antes de tener la sensación de sed. También contribuyen al aporte hídrico diario las infusiones, caldos, cremas de verduras…
Ejercicio
Completa tu rutina alimentaria con, al menos, media hora de deporte diaria, por ejemplo caminando, nadando, corriendo o montando en bicicleta.
Como veis, es muy fácil seguir estos pequeños consejos; seguro que notais resultado.